No sin razón, nos hemos preocupado, incluso hasta la angustia, por nuestros semejantes; por su salud; por lo que han sufrido debido a las cuarentenas. Pero también nos hemos olvidado de otro que sufre. Hemos olvidado que el medio ambiente no ha sido inmune a la propagación del virus a escala planetaria, que, contrario a lo que pueda pensarse, ha dejado en ella efectos nocivos.
Para este momento en que escribo, se han generado ya una multitud de informes sobre cómo ha sido impactado negativamente nuestro ecosistema natural a causa del Sars Cov-2. Esto nos tiene que hacer reflexionar no solamente en que hacemos como seres humanos para cuidarnos a nosotros mismo y a nuestro prójimo, sino también al planeta tierra en la nueva normalidad que empieza a instalarse en nuestra vidas.
Lo que podemos hacer desde las empresas por el medio ambiente
Creo que las empresas hoy pueden llevar la batuta en el cuidado del medio ambiente. Después de todo y de tanto, acaso seamos nosotros, la comunidad empresarial, la que hemos sido privilegiados por una naturaleza que ha aportado a nuestro desarrollo empresarial.
Ahora bien, viendo estas circunstancias actuales con los temas relacionados al calentamiento global, los índices de emisión de carbono, que responden a varias causas, como empresarios podemos sumar a este esfuerzo global por el medio ambiente, tomando en cuenta aspectos como:
Legislación
Lo primero es adaptarnos a la normativa local que regula nuestro quehacer empresarial e ir asumiendo la responsabilidad individual del caso.
Reciclar
A veces se nos puede olvidar, cómo estos pequeños gestos llegan a tener un impacto a mediano plazo, positivo, para nuestro ecosistema. Siempre nuestras empresas generan en mayor o menor cantidad, residuos de plásticos que reciclar de forma correcta, aminorando el impacto sobre ecosistemas naturales.
Consumo inteligente
Este punto siempre es bueno tocarlo. Podemos hacer un consumo energético más eficaz de los recursos como estos ¿cómo? Usando bombillos ahorradores. Hay muchos en el mercado, de todos los tamaños.
Asimismo, debemos asumir nuevos hábitos, unos más ecológicos, como por ejemplo, empezar reciclando el papel. A medio plazo nuestro ambiente lo agradecerá.
Movilidad
A veces los cambios parecen una cuesta muy arriba, empinada. Pero la verdad es que el uso de transportes alternativos como la bicicleta, el transporte público, abonarán en esta dirección. Incluso, hay empresas de Europa que dan un bono a aquellos trabajadores que usen bicicletas para llegar a sus trabajos.
Es decir, que como empresas productoras podemos llevar la voz cantante sobre el tema ecológico, siempre de manera objetiva, si adoptamos y promovemos en nuestro recurso humano hábitos de cambios orientados a un consumo más eficiente de los recursos, de nuestro medio ambiente. Así que te invito a iniciar el año pensando en verde.