Si es hondureño, seguro conoce muy bien la historia del Cacique Lempira. No por ello me parece menos meritorio dedicarle unas pocas líneas para refrescar la historia, presentársela, a su vez, a los nuevos lectores que se suman.

El Cacique Lempira fue un líder que se reveló contra la ocupación española. Destacan su valentía y gallardía en el campo de batalla y su liderazgo amalgamador, que logró atraer a cientos de indígenas luchadores. Murió asesinado por un arcabuz cuando se negociaba la paz en una batalla. Su legado ha sobrevivido al tiempo y, gracias a ello, heme aquí rescatando los aspectos más relevantes de este gran líder visionario.

La razón de ser del Cacique Lempira

Los historiadores hondureños describen a nuestro personaje histórico como un hombre razonable, porque solo tenía dos mujeres y era un hombre comedido. Transformemos esto en algo de relevancia para nosotros: Si quiere iniciar dos negocios al mismo tiempo, es probable que uno de ellos fracase, porque los negocios son demandantes y lo son mucho más al inicio. Necesita enfocarse y dedicarle toda su energía por el tiempo necesario para que prosperen.

Las propuestas de cambio

Nuestro Cacique no entendía por qué tantos indios valientes se dejaban someter por pocos españoles, así que decidió cambiar esto y lanzarse en una cruzada para tomar las armas.

¿Qué nos enseña esto? Si hay algo que no le gusta o puede ser mejorado, usted tiene la oportunidad de cambiarlo. Estas fallas son oportunidades de negocio que deben ser aprovechadas. Además, si la cruzada es compleja, intenta convencer a otros para que se unan, hablo de inversionistas, profesionales, colaboradores, etc.

Cuide la lengua

Un interesante aspecto del Cacique Lempira es su muerte. Se dice que llegó con una actitud prepotente y el soldado intentó persuadirlo porque esperaba poder llegar a un punto de acuerdo para no tener que asesinarlo. Sin embargo, su arrogante discurso lo llevó a la muerte.

Si bien es cierto que existían diferencias abismales entre ambos, y la sumisión no era una opción para un pueblo maltratado, cabe destacar que todos necesitamos de los demás para salir adelante, bien sea en el ámbito profesional o en el personal. La humildad nos ayuda a encontrar manos dispuestas a impulsarnos, a crear oportunidades y ha mantener un perfil cercano con nuestros contendientes.

El Cacique Lempira es, para muchos, una realidad, un héroe nacional, pero para otros es simplemente una leyenda. Sin importar si es real o no, decido verlo como un gran líder, que con pocos recursos pudo dejar una huella imborrable en el paso de los tiempos, del cual  podemos tomar algunos aprendizajes de batalla –y de vida- para utilizarlos sabiamente en la construcción de nuestros negocios.